(Texto de Zagros, en breve nuevo co-autor del blog. Como veis, no cambiamos la tónica.)
Me gustan los juegos.
Quizá es una secuela. O una precuela, quién sabe.
Sin embargo a veces me da la impresión de que sobrepaso los límites de los juegos, voy demasiado lejos. Si un niño me viera me diría que soy un tramposo. Sin embargo en estos juegos quiero ver hasta dónde puedo llegar, si tengo límites, y si los tengo dónde están mis límites, si tengo conciencia. Vale, lo reconozco, me paso en los juegos, pero no se quedan atrás. Estos juegos son un resultado, un efecto. Niño a quién golpean sus padres va a golpear a sus hijos.
Tenéis un problema: os gusta jugar, pero no soportáis perder, chicas. Jugar está muy bien cuándo ganáis, pero si perdéis venís con cosas cómo “Ahora qué hago, no merece la pena seguir así...”, etc.
Y os váis con vuestro pagafantas para llorarle en el hombro, mientras él se muere por daros un beso, por una palabra dulce, sin saber que él es vuestro premio de consolación, jugáis con el sin riesgo, sabedoras de que vais a ganar. Necesitáis ganar. Necesitáis ser la capitana del barco. Una lástima que hayas dado con un pirata tramposo.
Decís “te quiero” a boca llena, y tú y yo sabemos que es solo un juego, una forma de medirte, cuánto tiempo tardará en caer? Esta vez no ha caído
Chica guapa, pero solo guapa.
No me digas que te duele, que me quieres, no intentes engañar a un mentiroso, no lo vas a conseguir.
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Wow que lindo el blog
ResponderEliminarjejejee
"no intentes engañar an mentiro"
jejeje
buenaa!!
^__^
Bravo
ResponderEliminarMe encanta el post, estas hecho un fiera.
ResponderEliminarQuizas yo deberia aprender a jugar tambien, aunque creo que las mujeres nacen ya con esa habilidad... no crees?
Son un mundo aparte, y por muchas novelas romanticas que gusten de leer, en el fondo la mayoria son incapaces de sentir. Ni de ver nada que no sean sus propios beneficios personales.
Un saludo
Gonzalo
Eso esta muy bien y posiblemente lleves razon sin embargo tampoco te da derecho a ser un cabron. Niño a quien golpean sus padres no tiene porke rebajarse a su nivel y pegar a sus hijos, no somos niños y no debemos hacer las cosas por despecho. De todas formas me gusta tu blog, espero k sigas escribiendo en él. Un saludo
ResponderEliminarJugar o no jugar, he ahí la cuestión.
ResponderEliminarGanar o perder es relativo.
Siempre se gana algo de experiencia como objeto, siempre se pierde algo de dignidad.
No soy la persona más digna, puesto que el término persona lleva en alguna parte intrínseca la falta de dignidad.
Me divierte jugar.
Pero soy consciente de lo que pierdo y sé que no es una batalla.
A ver si publicamos más, que estoy aburrida de no ver nada nuevo.
Saludos desde el castillo.
Tengo muchas cosas que decir:
ResponderEliminar->Jamás te fies de una mujer que lee novelas de amor. Tampoco de una que lleva tacones y no se queja, ni un poquito.
->Todo el que juega, y le gusta, sabe que hay riesgo(curasanacurasana pagafantas)
->No necesitamos demostrarnos que podemos ganar, lo sabemos, y por supesto que no es una manera de medirnos.